Naturalista es una persona a la que le gusta aprender sobre la naturaleza principalmente por experiencia directa. Algunas características que tiene o desarrolla el naturalista son la curiosidad, la observación consciente, el cuestionamiento o pensamiento crítico, la sensibilidad a la estética, la creatividad, la exploración, y el estar en contacto con la naturaleza.
El término naturalista fue aplicado a los exploradores de las ciencias naturales del siglo XVIII y XIX. Estos naturalistas tenían intereses amplios que integraban distintas disciplinas como la geología, biología, medicina, astronomía, química, y física.
Algunos de los grandes naturalistas fueron el prusiano Alexander von Humboldt (1769-1859), el francés Aimé Bonpland (1737-1858), los ingleses Charles R. Darwin (1809-1882), Alfred R. Wallace (1823-1913), y Henry W. Bates (1825-1892) y el alemán Fritz Müller (1822-1897), entre muchos otros. Todos ellos grandes viajeros, exploradores y divulgadores de la ciencia (Ver Lecturas).
Entre sus contemporáneos en la Nueva España, sobresalen el jesuita Francisco Xavier Clavijero (1731-1787), su alumno José Antonio Alzate (1737-1799) y el astrónomo, médico e historiador Antonio León y de Gama (1735-1802). El primer Gabinete de Historia Natural se creó en 1790 como resultado de la Real Expedición Botánica a la Nueva España (1787-1803), en lo que es hoy Av. Madero en el centro histórico de la Ciudad de México.
En esta expedición participaron los españoles Martín Sesse y Lacasta, Vicente Cervantes, Juan Diego del Castillo, Jaime Senseve y José Longinos Martínez. A la expedición se incorporó el médico y botánico novohispano José Mariano Mociño (1757-1820) nacido en Temascaltepec (Hoy Estado de México). Mociño recorrió gran parte de las colonias españolas desde Guatemala hasta Canadá, surcando las costas del Pacífico. En estos emprendimientos lo acompañaron los jóvenes artistas Atanasio Echeverria y Vicente de la Cerda. Además de registrar las plantas y animales con alrededor de 2000 láminas, escribió detalladamente sobre el lenguaje y las costumbres de los indígenas canadienses de la Isla de Nutka (Hoy Isla de Vancouver).
La Sociedad Mexicana de Historia Natural se creó en 1868 con naturalistas como el geólogo Antonio de Castillo (1820-1895), el médico y farmacéutico Alfonso Herrera Fernández (1838-1901) y el médico y paleontólogo Manuel M. Villada Peimbert (1841-1924). Puedes conocer otros personajes importantes (naturalistas) de México en “Curiosos y comprometidos: una historia natural mexicana”.
El término naturalista también ha sido utilizado en la historia del arte (pintura y literatura) para definir a los autores que utilizan un enfoque realista en sus obras. Esta corriente se identificó con el movimiento de artistas iniciado en Francia después de la revolución de 1848.
Un grupo fundamental de esta iniciativa es la “Escuela de Barbizon” (1830-1870) que tomó su nombre de esta villa al sureste de París, Francia, cerca del famoso bosque de Fontainebleau, al sureste de París, dominado por pinos, hayas, abedules y arces.
A pintores franceses como Jean Baptiste Camille Corot (1796-1875), Charles-François Daubigny (1817-1878), Jean-François Millet (1814-1875) y Theodore Rousseau (1812-1867) les gustaba realizar obras al aire libre de bosques y paisajes rurales.
Las pinturas de Camille Corot y de la "Escuela de Barbizon" son el antecedente más claro de los pintores impresionistas del siglo XIX y XX, como los franceses Claude Monet, Edgar Degas, Pierre Auguste Renoir, Paul Cézanne, Gustave Caillebote, Édouard Manet, Camille Pisarro y en México, el campechano Joaquín Clausell (1866-1935).
En la literatura, el naturalismo es resultado de una reacción contra el romanticisimo y bajo la creciente influencia de las ciencias. Representa a la realidad de forma objetiva. Destacan los franceses Gustavo Flaubert (1821-1880) con “Madame Bovary” y Emilio Zola (1840-1902) con “Germinal” y los escritores rusos Fyodor Dostoievski (1821-1881) con “Crimen y Castigo” y los “Hermanos Karamazov”, Anton Chekhov (1860-1904) con “El tío Vanya”, y Máximo Gorki (1868-1936), con “La Madre”.
En México, el principal representante de esta corriente fue el escritor y diplomático Federico Gamboa (1864-1939) con su obra “Santa”, sobre la sociedad de la Ciudad de México en la época porfiriana.
En la actualidad nuestra relación con la naturaleza ha disminuido drásticamente, a pesar de que dependemos totalmente de ella. Los grandes centros urbanos nos alejan de la naturaleza. El periodista y autor estadounidense Richard Louv ha descrito detalladamente la desconexión actual de los niños con la naturaleza y así como la variedad de beneficios de salud física y mental que la naturaleza proporciona.
El psicólogo estadounidense Howard Gardner (1948-), en su libro sobre la teoría de inteligencias múltiples de 1983 reconoció siete tipos de inteligencia y un poco más tarde... en 1995 propuso el octavo tipo de inteligencia, la naturalista.
Por su parte, el entomólogo estadounidense Edward O. Wilson (1929-2021), padre de la sociobiología, en su libro “Biophilia” de 1984, consideró que todos tenemos un amor innato a la naturaleza, a las especies y a la vida, y consecuentemente necesitamos y buscamos el contacto con la naturaleza. Esta tendencia a la biofilia, o amor por la naturaleza, es un producto de nuestra evolución biológica.
El objetivo de Somos naturalistas es facilitarte la vida como naturalista. Afortunadamente, existen muchas herramientas que nos pueden ayudar a desarrollar las capacidades del naturalista y aquí iremos sugiriendo algunas (ver Herramientas).