¡Hay que ser original! Pecaríes albinos en el Cerro de la Silla en Monterrey
Los animales albinos no son comunes en la naturaleza ya que son presa fácil de sus depredadores. Estas observaciones revelan que los pecaríes de collar pueden mantener individuos albinos por varias generaciones. El 8 de diciembre de 2014 la naturalista bionayelli26 registró un grupo de pecaríes de collar con dos individuos: ¡albinos!.
Un estudio de los mamíferos de El Cañón del Huajuco (1998) reportó un par de pieles de pecaríes albinos cazados en 1979 en la Presa de la Boca (Presa Rodrigo Gómez), a tan solo 26 kilómetros de la observación. Esta es una gran coincidencia y se podría especular que el albinismo se ha mantenido en las poblaciones de pecaríes de la región por más de 30 o 40 años.
Al parecer los pecaríes albinos registrados son parte de una manada de alrededor de una docena de individuos de coloración normal. El naturalista arturo3 recordó que había leído sobre pecaríes albinos precisamente en Nuevo León. Esta observación fue compartida en la Revista Entorno de la Universidad Autónoma de Nuevo León por los naturalistas aztekium y biolily en 2017. Otros naturalistas han continuado reportando a esta familia bicolor en 2015 (raulernestoo3), 2016 (caracoldelluvia), 2017 (bionayelli), 2018 (gonzalezii), 2019 (braytonidae) y también en 2019 el naturalista manuelnevarez documentó una cría albina.
Aunque en la naturaleza las variaciones en la pigmentación de los animales son el pan de cada día, el albinismo no es común. El albinismo es causado por un gen recesivo, por lo que solo se manifiesta cuando los dos progenitores lo transfieren. El resultado es una falta del pigmento melanina en la piel y los ojos. Los albinos suelen tener los ojos muy claros (azules) o bien rosados o rojos, lo que los hace más sensibles a la luz. El leucismo también es una falta de pigmentación, pero en este caso no sucede en los ojos.
Los individuos albinos en cualquier especie tienen un mayor riesgo de ser depredados, primero porque pierden la ventaja que les da el camuflaje de su pelo o piel, y segundo porque su vista es afectada. Quizá debido a la conducta social de los pecaríes que viven en grupos familiares y se protegen es la razón por la cual se ha mantenido esta población con individuos albinos.
El pecarí de collar es una de las dos especies de pecaríes que viven en México. Este mamífero ocupa todo el territorio mexicano con excepción de la península de Baja California. El pecarí de labios blancos está restringido a Chiapas y el sur de la península de Yucatán.